viernes, 31 de julio de 2015

UNA VIDA SALUDABLE EN EL ADULTO MAYOR

PARA
VALORACIÓN DE ENFERMERÍA EN LOS CUIDADOS EN EL ADULTO MAYOR 

 ¿Qué Valorar?
 Existen muchas dimensiones para valorar al adulto mayor: física, actividades de la vida diaria, estado mental, psicoafectiva y social o familiar. Para facilitar el aprendizaje, el desarrollo siguiente sigue este mismo orden de precedencia.

1) Valoración Física:
Ojos “ojos hundidos” y laxos, lo que se produce por una pérdida de las estructuras de soporte del ojo − Observar sequedad y pérdida de brillo ocula
 − Observar formación del arco senil, debido a depósitos de colesterol
 − Reducción del lagrimeo 
− Aumento de la presión intraocular




Oído
 − Valorar la necesidad de utilizar audífonos por pérdida de la agudeza auditiva (disminuye la capacidad de percibir, localizar y discriminar los sonidos, debido a la disminución de las células ciliadas del órgano de Corti a partir de los 50 años) 
− Valorar el control postural reflejo
 − Reducción de la habilidad de desplazarse en la oscuridad
 − Presbiacusia, es decir, aumenta la intensidad del sonido
 − Reducción de la tolerancia a los tonos altos 
− Aumenta la capacidad de reacción ante un estimulo, lo cual se incrementa en los mayores de 70 años


Boca:
− Pérdida del sentido del gusto por sequedad de las mucosas 
− Pérdida del apetito 
− Reducción de la agudeza de las papilas gustativas
 − Reducción de la sensación del calor o frío 
− Reducción de la sensibilidad del reflejo tusígeno 
− Valorar la deglusión (se dificulta con la edad) 
− Reducción del reflejo del vómito 
− Valorar la habilidad masticatoria (disminuye con la edad) 
− Valorar el deterioro dental (pérdida de piezas)

Nariz :
− Reducción del sentido del olfato por una disminución de la vascularización de los senos paranasales − Observar el crecimiento del cartílago nasal e hipertrofias de las vellosidades del ala de la nariz Aparato Respiratorio − Reducción del volumen respiratorio 
− Reducción de la perfusión periférica
 − Aumento del diámetro anteroposterior y la rigidez torácica
 − Reducción del movimiento ciliar y de la eficacia de la tos.

Aparato Respiratorio :
− Reducción del volumen respiratorio 
− Reducción de la perfusión periférica 
− Aumento del diámetro anteroposterior y la rigidez torácica
 − Reducción del movimiento ciliar y de la eficacia de la tos 
− Reducción de la distensibilidad muscular; hipoventilación de los alvéolos con la consiguiente disminución a la tolerancia del ejercicio 
− Reducción de moco producto de la resequedad de las membranas mucosa lo que predispone a las infecciones respiratorias − Valorar frente a un cuadro respiratorio la mecánica de la tos y favorecer la hidratación para fluidificar las secreciones



Sistema Cardiovascular: 
− Aumento de la presión sistólica con un ligero aumento de la presión diastólica; hipotensión ortostática. 
− Reducción de la frecuencia y del gasto cardíaco, entre un 30 y 40% durante el esfuerzo físico
 − Reducción de la circulación arterial

Aparato Gastrointestinal:
 − Reducción de la producción de saliva, ácido gástrico, enzimas digestivas y moco intestinal. 
− Reducción de la motilidad intestinal, debido al envejecimiento neuronal en el sistema nervioso central y a los cambios del colágeno. 
− Reducción del peristaltismo esofágico
 − Reducción de la tolerancia alimentaria producto de la disminución de la flora bacteriana.






Aparato Renal:
 − Reducción de la perfusión renal 
− Valorar el patrón de eliminación (nicturia) 
− Valorar la presencia de síntomas y/o signos de incontinencia urinaria, (de estrés, urgencia, inaplazable, rebosamiento y funcional), las cuales pueden presentarse en forma única o simultánea 
− Valorar la dificultad para iniciar y terminar el chorro de orina en el varón, debido a una hipertrofia prostática



Sistema Reproductor Femenino :
− Estrechamiento y acortamiento de la vagina 
− Reducción en la producción de estrógenos
− Cambios en la flora y ph vaginal. 
− Reducción de la lubricación vaginal 
− Observar atrofia vulvar − Reducción y aclaramiento del vello pubiano

Sistema reproductor masculino:
− Reducción del tamaño y de firmeza de los testículos 
− Aumento del tamaño de la glándula próstatica 
− Aumento del diámetro del pene 
− Reducción de la producción de testosterona

Sistema Musculoesqueletico:
− Reducción de los movimientos voluntarios rápidos 
− Reducción de la amplitud de los movimientos debido a la rigidez muscular
 − Existe una respuesta diferida ante los reflejos (constricción y esclerosis de tendones y músculos)
. − Reducción de la masa muscular, no asociándose a pérdida de fuerza 
− Reducción de la estatura 2.5 a 10 cm (pérdida de agua el tejido cartilaginoso y un estrechamiento discos vertebrales).
 − Observar cambios artrósicos en las articulaciones






Sistema Neurológico:
− Reducción de la velocidad de conducción de algunos nervios
 − Reducción del sentido del olfato 
− Reducción del sentido postural
 − Reducción de la sensación táctil y de la sensibilidad a las temperaturas extremas 
− Valorar el patrón de sueño 
− Reducción del rango, intensidad y duración de la voz



2) Valoración de las actividades de la vida diaria.

 Los adultos mayores generalmente prefieren vivir separados de sus hijos, sin embargo las enfermedades y el grado de autovalencia de ellos hacen necesario la ayuda con las actividades de la vida diaria. Es necesario llegar a un justo equilibrio y aprender a equilibrar la dependencia de la independencia por parte de los adultos mayores. Los cuidadores requieren de los conocimientos para poder sobrellevar este nuevo estado de sus familiares. Se consideran actividades de la vida diaria: − Actividades Básicas: como alimentarse, bañarse, vestirse, deambular, comunicación y el control de esfuerzos. − Actividades Instrumentales: limpiar, cocinar, lavar la ropa, usar el teléfono, ir de compras, control del dinero, usar el transporte público, trabajo casero (jardinería), control de la medicación, subir las escaleras, entre otras actividades.

3) Valoración del Estado Mental.

El estado mental es la total expresión de las respuestas emocionales de la persona, del ánimo, la función cognitiva y la personalidad. Está absolutamente ligado al funcionamiento del individuo lo que comprende la motivación e iniciativa; la formación de expectativas o metas, el planeamiento y desarrollo de tareas y actividades; el autocontrol y la integración de la retroalimentación de las múltiples fuentes de energía. El foco de la valoración está en la identificación de las fortalezas del adulto mayor y sus capacidades para interactuar con el medio. El estado mental del adulto mayor no presenta una declinación en su inteligencia a menos que exista un desorden neurológico o se desarrolle alguna alteración sistémica. La capacidad para resolver problemas que tiene el adulto mayor probablemente puede declinar por desuso, pero su imaginería no presenta cambios significativos. La memoria remota es más eficiente que la reciente, pero esto es función del patrón general de salud que presenta la persona. Con la edad hay una declinación en la síntesis y el metabolismo de los neurotransmisores, en momentos de estrés el metabolismo es inadecuado para responder a una presión tan alta como puede serlo una enfermedad aguda o un desequilibrio metabólico. Esto se puede observar claramente en la hospitalización aguda de un adulto mayor que pude presentar un delirium como una forma de mostrar su inadaptación a este fenómeno. En cuanto a las tareas cognoscitivas del adulto mayor incluyen llegar a la aceptación de su propia muerte y la de sus seres cercanos; aprender a tener una vida feliz aceptando sus enfermedades y limitaciones físicas. En resumen, los dos aspectos que se deben valorar son: a) Cambios en las funciones mentales: cognitivas, proceso de pensamiento, memoria y confusión b) Depresión Para examinar el estado mental se recomienda valorar una serie de aspectos tales como: apariencia y comportamiento, habilidades cognitivas, estabilidad emocional, lenguaje y expresión oral.

4) Valoración Psicoafectiva

La valoración de la situación psicoafectiva y del desarrollo se focaliza principalmente en una esfera subjetiva, en donde adquiere vital importancia la autovaloración del estado de salud y del grado de apoyo social que posee de sí mismo el adulto mayor y, por otro lado, la valoración objetiva del profesional de enfermería que apunta a la detección de la psicopatología y de los déficit de autocuidado. Afectividad Una de las principales tareas afectivas del adulto mayor es revisar los logros de la vida. Ellos logran una sensación de satisfacción e integridad del ego cuando sienten que los sucesos vitales de su vida han sido positivos. La espiritualidad se aumenta en esta etapa de la vida lo cual se traduce en una mayor filosofía de la vida. Con esto es posible experimentar una sensación de importancia, lo cual puede ayudarle en su aceptación y autoestima. La sexualidad en esta edad esta llena de mitos y creencias y a su vez se le da menos importancia que a otros aspectos de la salud de los adultos mayores. Es importante destacar que la expresión de sexualidad de ellos gira en torno a la expresión de ternura, afectividad, cariño, respeto, compresión, expresiones verbales y no verbales y la ayuda mutua. Sin lugar a dudas que en la expresión de la sexualidad influyen los aspectos físicos, psicológicos, socioemocionales y el manejo que hayan tenido de su sexualidad durante toda su vida.




5) Social y Familiar 

El significado que el adulto mayor y la sociedad le da ha esta etapa dependerá en gran medida de la cultura en que se encuentren. Por ejemplo, para la cultura oriental el adulto mayor es el ser más sabio y respetado, lo cual refleja un concepto de vejez muy distinto al de la cultura occidental. Los adultos mayores no sólo deben enfrentarse a los cambios físicos e intelectuales propios de su ciclo evolutivo, sino que también al cambio en su estilo de vida, de roles y de responsabilidades sociales. Sin lugar a dudas que la adaptación a esta serie de cambios requiere de una capacidad individual y del apoyo externo. Es importante valorar a la familia que otorga los cuidados al adulto mayor e indagar en aspectos como: − ¿De qué manera afrontan los cambios en las necesidades del adulto mayor? − ¿De qué manera solucionan sus problemas de salud? − ¿Buscan ayuda en forma oportuna? − ¿Cómo manejan el estrés? − ¿Ofrecen sensación de bienestar al adulto mayor? − ¿Son capaces de satisfacer los requerimientos de cuidado del adulto mayor? − ¿ Van a cuidar ellos o trasladar a un lugar de estadía a sus familiares adultos mayores? De esta manera es posible indagar más sobre la dinámica familiar y es posible hacer un diagnóstico de las potencialidades y carencias de la familia con el objetivo de fijar los lineamientos de la intervención de enfermería.


 CUIDADO DE ENFERMERÍA INTEGRAL EN EL ADULTO MAYOR

 La atención de enfermería descrita en este capítulo se enmarca en el Modelo de Autocuidado de Dorothea Orem, que permite su aplicación en todas las situaciones de valencia del adulto mayor, incluyendo al grupo de los cuidadores como parte importante en su cuidado.





 El objetivo de este capítulo es que el profesional logre: 

− Diferenciar, desde una perspectiva integral, el envejecimiento normal y el patológico en un adulto mayor.

 − Detectar problemas o desviaciones de salud de acuerdo al modelo de Orem. − Plantearse diagnósticos e intervenciones.

 − Clasificar el sistema de enfermería a utilizar

 − Conocer y aplicar los cuidados básicos de enfermería geriátrica − Fortalecer prácticas de auto cuidado para los adultos mayores y sus cuidadores.

 − Ofrecer apoyo a los cuidadores

 Cuidados de Enfermería en el Adulto Mayor 


 En el estado de salud de un adulto mayor influyen distintos factores tales como: influencia genética, habilidades cognoscitivas, edad, sexo, ambiente, estilos de vida, localización geográfica, cultura, religión, estándar de vida, creencias y prácticas de salud, experiencias previas de salud, sistemas de apoyo, entre otras dimensiones. Al valorar a un adulto mayor es necesario hacerlo en una perspectiva integral para identificar los problemas físicos, psicológicos y sociales que presentan ellos y sus cuidadores.

 Concepto

 El envejecimiento es parte del continuo del hombre en el ciclo vital, sus efectos varían de un individuo a otro, puede desarrollarse en forma paulatina y en un momento determinado mostrar sólo algunas características. La enfermedad no debe considerarse como un fenómeno de envejecimiento, sin embargo, cuando se identifica una desviación de salud es importante sospechar la asociación con otros trastornos, ya que lainteracción constituye una característica de este proceso; la clasificación del envejecimiento ha cambiado en los últimos años y en nuestro país se considera adulto mayor al que tiene 65 años y más, sin diferenciación con las edades más avanzadas.
Principales Conceptos y Definiciones: 

 Autocuidado: es la práctica de actividades que las personas jóvenes y maduras emprenden con relación a su situación temporal y por su propia cuenta con el fin de seguir viviendo, mantener la salud, prolongar el desarrollo personal y conservar el bienestar.

Requisitos de Autocuidado: derivan de una reflexión interior formulada expresamente que distingue las acciones que son necesarias para regular los diversos aspectos del funcionamiento humano y el desarrollo permanente o en condiciones y circunstancias específicas. Por cada requisito del autocuidado formulado se fija: 1º el factor que se debe controlar u orientar para mantener el funcionamiento y, 2º la naturaleza de la acción realizada.

Requisitos de autocuidado universales: los objetivos necesarios a escala universal que se deben satisfacer a través del autocuidado o del cuidado dependiente y que ocurren en las diversas etapas del ciclo vital.

Requisito de auotocuidado relativo al desarrollo: estor se desprenden de los universales y se definen como aquellos que tienen como objeto promover mecanismos que ayuden a vivir y madurar y a prevenir enfermedades que perjudiquen dicha maduración o aliviar sus efectos.

 Requisitos del autocuidado en desviación de salud: son comunes a las personas que están enfermas o que han sufrido un accidente en los que se incluyen defectos y discapacitación, y para los que existe un diagnostico y se ha iniciado u tratamiento médico.

Demanda de autocuidado terapéutico: es la suma de todas las medidas sanitarias necesarias en un momento dado para satisfacer las necesidades de autocuidado conocidas del individuo que dependen en particular de cada enfermedad y sus circunstancias.

Actividad de autocuidado: es la capacidad compleja adquirida por las personas para conocer y satisfacer en forma continua sus necesidades y llevar a cabo una ación deliberada para regular su funcionamiento y desarrollo.

Agente de autocuidado: son personas que aceptan y cumplen con la responsabilidad de conocer y satisfacer las necesidades de autocuidado terapéutico de otras personas o bien de regular el desarrollo para que esas personas lleguen a conseguir su autocuidado.

Déficit de autocuidado: relación entre la demanda de autocuidado terapéutico y la actividad autoasistencial en el cual las capacidades de autocuidado desarrolladas no resultan adecuadas para satisfacer una parte o la totalidad de los componentes de la demanda existente o potencial.

Sistemas de enfermería: secuencia de acciones prácticas y deliberadas que llevan a cabo las enfermeras con sus pacientes para conocer y satisfacer los componentes de las demandas de autocuidado.

Métodos de acción: son métodos de ayuda en una sucesión de acciones que al aplicarse resuelven o compensan las limitaciones que tienen las persona en el ámbito de salud para regular su funcionamiento o de otros. Estos métodos pueden combinarse y adaptarse a las necesidades de las personas en función de sus limitaciones y son cinco.


CUIDADOS DE ENFERMERÍA EN EL ADULTO MAYOR

PERFIL DE ENFERMERÍA

 La adaptación al envejecimiento no es tarea fácil para los adultos mayores y requiere que los profesionales que participan en su cuidado se caractericen por una muy especial vocación y amor al trabajo con este grupo etáreo, lo que se traduce en una actitud que trasunta valores como: el respeto por el otro, la autonomía y la compasión para brindar cuidados humanizados al adulto mayor y que se extiende también a su grupo directo de cuidadores. El propósito de la enfermería geronto-geriátrica es ayudar al adulto mayor y sus cuidadores a enfrentar el proceso de envejecimiento, entendiéndolo como proceso natural y adaptativo e interviniendo en maximizar sus fuentes de poder. Para Miller, las fuentes de poder son la fuerza física, la reserva psicológica y social, el concepto de sí mismo y su autoestima, la energía, el conocimiento, la motivación y las creencias. Para lograr lo anterior se requieren de profesionales de enfermería que se destaquen por sus actitudes, habilidades y valores en el campo de la ética, la actitud humanitaria, la sensibilidad, el respeto y el amor al adulto mayor y el interés por el desarrollo profesional basado en la investigación continua.

1. Teorías del Crecimiento y Desarrollo: Existen diversas teorías y clasificaciones de la vejez, no siempre centradas en el número de años. Erickson (1968) pone énfasis en los estadios de la adultez y relaciona en su teoría la edad de la madurez con la integridad del Yo v/s la desesperación, en la cual la persona se acepta con sus éxitos, fracasos y limitaciones. 

2. Cuidado de enfermería y el Autocuidado: Se fundamenta en el marco conceptual del modelo de Dorothea Orem. Para Orem, enfermería debe identificar las capacidades potenciales de autocuidado del individuo para que ellos puedan satisfacer sus necesidades de autocuidado con el fin de mantener la vida y la salud, recuperarse de los daños y de la enfermedad y manejarse con sus efectos.